Un “rebel outlaw” metapolítico.
Prólogo a “Transmisiones Selectas” de Paul Waggener
por Gabriel Grasso.
Paul Waggener es un escritor, músico(cuyos proyectos son Pale Riders, Totenwolf y Hunter’s Ground, además de que como músico solista se desempeña en el sub-género Outlaw Country) y artista marcial que reside en una zona rural en los Montes Apalaches. Una cordillera montañosa ubicada al este de Estados Unidos. Esta tierra salvaje pertenece históricamente a granjeros, también conocidos como “Hillbillies” y trabajadores de las minas de carbón. Es una región con un gran misticismo y fue atravesada, durante muchos años, por guerras, tragedias y miseria. Se la conoce como Apalacchia. Su espíritu de lucha es propio de los lugares con relieves imponentes y magnánimos; y de las comunidades sufridas y luchadoras que allí habitaron.
En esos frondosos bosques es donde Los Lobos, la mannerbund a la que pertenece Paul Waggener, tienen su guarida. Su “ojo de la cúpula”, su santuario.
Esta agrupación hace muchos años viene fortaleciéndose y manifestándose de diferentes formas, una de sus vías es a través de Operation Werewolf: La propagación de su propia cosmovisión.
Esta es su respuesta y ataque al mundo moderno y su cosmovisión horizontal, a través de un puñetazo de, como Paul Waggener lo llama: “relentless positivity” (Positividad Implacable).
Si tenemos que hablar del autor, lo primero que podemos observar de Paul Waggener es que es verdaderamente un intelectual. En el verdadero sentido(en el sentido no profano). Tiene un gran discernimiento. Y eso es el verdadero intelecto. Aplicable a conceptos teóricos, tanto como a la acción y hasta un instinto callejero muy muy refinado. Es alguien que tiene la capacidad de servirse de su propia experiencia para lograr una forma muy útil de comunicar sus ideas y verdaderamente convertirlas en algo funcional. En herramientas. En otras palabras, sus ideas son totalmente prácticas. No encontrarás en sus artículos algo similar a lo que Vivekananda solía llamar como “malabares de la mente”. Y a diferencia de muchos seudo intelectuales que pululan teorizando por el mundo sin cesar, este Hombre encarna lo que escribe. Es un hombre que busca que su vida sea su propia Obra de Arte.
En sus escritos no encontrarás nada sobre política partidaria, reivindicación a ningún gobierno, parafernalia, ni tampoco glamour o etiquetas de ningún tipo. Paul Waggener no es lo que el sistema pretende que sea para poder cazarlo. Porque ha entendido profundamente cómo funcionan las redes y estrategias de este sistema tecnocrático globalista. Por eso no es aplicable a él ningún adjetivo en código para llevarlo a la máquina de picar carne junto a los que etiquetan de disidentes.
En realidad, el problema de Paul Waggener, como para muchos de nosotros es que es un hombre en una escalada hacia la superación. Y no solo a nivel individual. Sino tribal. Porque es un hombre de familia. Un padre, un hijo y un hermano. Un hombre con un grupo de amigos. Y justamente por esto mismo es considerado peligroso por el sistema igualitarista post moderno actual. Es peligroso porque se identifica con sus antepasados, su sangre y crea alianzas con amigos, para superarse en conjunto. Para cultivar un futuro orgánico con sus pares.
Es peligroso porque pertenece a un grupo que reivindica a sus ancestros, crean su propio arte y conservan sus propios ritos. Cultivan su propia comida, tienen sus propias leyes y sus propios valores.
Así también es un poco el espíritu Rebelde de Apalachia. Al igual que el de los Lobos.
Porque el Hombre, para este sistema global totalitario, es una amenaza cuando se organiza por sí mismo y por un bien común. Cuando este no se identifica con la agenda global, es un Forajido. Un Bárbaro.
Esta forma de noble barbarie es lo que hará tambalear las estructuras del sistema en el largo plazo. El sistema lo sabe y por eso intenta tapar constantemente los focos de fuego sagrado que encuentran alrededor del mundo. Para eso utilizan a los medios y sus ratas pagadas.
En cambio, los disidentes ven que las luchas recreativas que les dan, cual hámster corriendo en sus ruedas, ya no sirven. Que la política partidaria es un cadáver putrefacto. Un entretenimiento oscuro. Y que la salida es a través de la familia, la comunidad y la sacralización de las actividades diarias(ritos).Creando un puente con lo alto.
Porque al sistema no le conviene que tengas alianzas con personas por encima del dinero, porque si es así, caes fuera de su manejo. Lo peor que puedes hacer(para el sistema) es tener un amigo que sea capaz de morir por proteger a tus hijos. Porque el sistema globalista actual, a ese tipo de lealtad no la puede comprar. Sus sicarios son solo ratas pagadas. Y otras hipnotizadas. Las ratas pagadas pueden ser mejor pagadas por otros. Y los hipnotizados no tienen más que la fuerza de sus cuerpos intoxicados, su miedo y sus mentes confusas y desenfocadas.
El sistema luchará para que no tengas lealtad a muerte con nadie. Y para que no tengas Honor. Serán capaces de ofrecerte todo o de quitarte todo para que no te salgas de su dominio. De su control.
Pero en este mundo oscuro aún hay valores ocultos como gemas preciosas que solo los hombres que buscan la trascendencia pueden llegar algún día a obtener de a poco a través de la Guerra Espiritual. Cuando la oscuridad empuja, la luz también lo hace. Y estas gemas no se encuentran en ningún mercado de las megaciudades. Si no en los bosques y los desiertos. En las áreas rurales. En la naturaleza indomable. En los corazones de los Guerreros.
Esto es lo que la obra de Paul Waggener tiene para ofrecer. Una alternativa al sistema vigente a través de la lucha interior. Operation Werewolf es la propagación de su cosmovisión. Su regalo al mundo.
Los invito a servirse de estos artículos que yo mismo seleccioné y que considero importantes para dar a conocer su obra entre los lectores de habla Hispana.
Espero sea el primero de muchos de sus trabajos traducidos al Español.
Gabriel Grasso.